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Una quinta prórroga in extremis

Una quinta prórroga in extremis

Según encuestas realizadas por el CIS, la ciudadanía mantiene su apoyo a la actual dirección del gobierno en lo que a la gestión del COVID-19 respecta.

El ejecutivo formado por la alianza entre PSOE y Unidas Podemos se ha visto inmerso en un intenso y complejo proceso de negociaciones con las demás fuerzas políticas para lograr la nueva prórroga del estado de alarma, cuya duración será finalmente de 15 días.


Esta prolongación del régimen de excepción –propuesta en un primer momento hasta el 5 de julio por instancia del gobierno– ha visto forzada su reducción para poder asegurar una renovación de los principales apoyos en el hemiciclo. De este modo, el acercamiento de Sánchez al Partido Nacionalista Vasco y, particularmente, a Ciudadanos para asegurar con sus votos la promulgación de una quinta prórroga ha operado en detrimento de su relación con Esquerra Republicana de Cataluña, uno de los socios esenciales del pacto de investidura.


La organización nacionalista solicitó como condición imprescindible para ofrecer su respaldo el fin del mando único del gobierno central y así negociar en condiciones de igualdad con la administración de la Generalitat Catalana. Al no ver cumplidas sus demandas, Gabriel Rufián, portavoz en el congreso de la formación expuso que con esta actuación, «se corre el riesgo de poner punto y final al espíritu de la investidura, que tanta ilusión despertó».

 


Por su parte, PP y VOX, contrarios a la actual gestión de la crisis, no han dudado en responder con dureza al plan de actuación del gobierno.
Pablo Casado, líder popular ha calificado de «pacto frankenstein» a la heterogénea composición que ampara la preservación del estado de alarma y confirma la existencia de vías alternativas para combatir la pandemia frente a los constantes intentos de cuartar la libertad ciudadana.


De igual modo, Santiago Abascal, dirigente de VOX anuncia que «la España de los balcones y las cacerolas es imparable», azuzando así a la ciudadanía de cara a las concentraciones que tendrán lugar el próximo 23 de mayo en la mayoría de las capitales de provincia.

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