Mujeres y hombres que no encuentren en adquirir responsabilidades públicas un modo de llenar sus bolsillos o, como mandan los cánones caballas del “aparenting” (modo autocrítica on) la única forma de obtener poder y notoriedad. No necesitamos gente que, con el carguillo en la mano, nos haga conocer a su Juanillo interior.

En esta ciudad, necesitamos héroes. Necesitamos gente que lo da todo sin esperar nada, que no  busca ser alguien, que lo es desde que nace, porque al mundo viene a aportar sin pretensiones. Necesitamos personas que no piensen que son el novio en la boda, el niño en bautizo y hasta el muñeco en la tarta. Necesitamos valores que se perdieron y deben volver, necesitamos lealtad, amistad, honorabilidad, honradez... necesitamos héroes, lo sabes... lo sé.

En esta ciudad, lo que no necesitamos es que alguien los elija, porque a los héroes, como a los artistas, se les ve de lejos, si se les sabe ver.