Legs of girl standing on sunny meadow with bouquets of flowers
Este lunes damos la bienvenida al verano.

Bienvenido verano, gracias por recordarnos que seguimos vivos

Bienvenido verano, gracias por recordarnos que seguimos vivos

Celebramos el solsticio y con él, la llegada del verano (al menos, en este hemisferio). Un verano que se nos presenta con ganas de recuperar el tiempo perdido; un verano que nos recuerda que estamos vivos. Bienvenido, verano. Preparados para disfrutarte. 

Oficialmente hoy, 21 de junio, da comienzo el verano, pero no es un verano cualquiera; se trata del VERANO, así, en mayúsculas; el verano en el que se alcanzará -o eso se espera- la inmunidad de rebaño y podremos empezar a recuperar el tiempo perdido. Porque habrá cosas y habrá vidas que no podemos recuperar; así que aún más por eso y aquellos que perdimos para siempre, le damos la bienvenida el verano de 2021 con más ganas y energía que nunca.

Aunque el día que da relevo a la noche de San Juan se conozca como el día más largo del año, realmente es hoy, con el solsticio de verano, cuando la llegada de la nueva y ansiada estación nos regala el día más largo del año. Según el Observatorio Astronómico Nacional (OAN), a las 05:32 del lunes 21 (hora oficial peninsular), la primavera dio paso al verano. La estación estival durará 93 días y 15 horas hasta que comience el otoño el 22 de septiembre. Así que tenemos casi 94 días para disfrutar.

Alimentarse rico. La cultura inca celebraba el solsticio de verano con una ceremonia, llamada Inti Raymi, que incluía sacrificios diversos y ofrendas de alimentos. Pero nosotros proponemos más que ofrendar, disfrutar de los saludables y apetitosos alimentos que nos da el verano. Gazpachos, sandías, melones, melocotones, ensañadas aliñadas.

Disfrutar del aire libre. Y todos esos fresquitos alimentos son ideales para meterlos en un tupper y comerlos en la playa, en la piscina, en el monte (con una gorra), sin necesidad de hacer un fuego porque todos ellos se disfrutan al natural.

Música para nuestros oídos y nuestro espíritu. Dicen que poco a poco este verano regresarán los conciertos, las fiestas, los bailes. Puede que aún no podamos bailar pegados ni en sitios cerrados, pero la música se va escuchando y la normalidad se va recuperando. Las mascarillas parece que podremos dejarlas guardadas al aire libre desde el próximo día 26 y, con suerte, a este San Juan no llegamos, pero para el próximo, hoguera de mascarillas.

Recuperar cosas perdidas. El verano es ideal para recuperar viejas costumbres como la de mandar postales, o bucear en el trastero de tus padres en busca de viejos tesoros. O ver una peli en el autocine del pueblo o pasar, por fin, una tarde disfrutando del ‘dolce far niente’ sin trabajos ni deberes.

Viajar. Cuánto hemos echado de menos viajar, y con precaución y prudencia, parece que este verano podremos recuperar esas excursiones, esas colas en los aeropuertos, esos viajes en coche con la familia. Y si no te decides con el destino, atentos a las propuestas que os estamos dejando cada semana en Qrónica.

Realmente la pandemia nos ha demostrado que lo que echábamos más de menos eran las relaciones sociales, las cotidianidades, compatrtir una pizzas con cervezas entre amigos, las barbacoas familiares, las escapadas, las acampadas sin reloj. El verano no es más que una oportunidad para recordarlo. Una oportunidad para caminar descalzos por la playa o por casa, para comer helados, para descubrir playas que no conocíamos, para abrazarnos de nuevo. Para celebrar que estamos vivos. Gracias verano por recordarnos que seguimos aquí. Bienvenido verano. 

Bienvenido verano, gracias por recordarnos que seguimos vivos