Señales de alerta ante una depresión

Apatía o falta de sueño son señales que podrían alertar ante una depresión.

Irritabilidad, insomnio, dolores crónicos sin causa, apatía, falta de sueño... Repasamos algunas señales que pueden alertarnos de que debemos acudir al psicólogo o psiquiatra.  

El suicidio de Verónica Forqué conmocionó a toda España esta semana. Pero además ha puesto en evidencia la necesidad de un abordaje integral y público de las enfermedades mentales y la salud mental. La depresión, un término usado a veces de manera liviana, es una enfermedad que debe atajarse con atención sanitaria mediantes profesionales especializados, como sucede con cualquier otra enfermedad. En este caso, psicólogos y psiquiatras.   

Tras el caso de la actriz, expertos sanitarios están alertando de que su participación en el reality de Masterchef dejaba evidencias de que Forqué estaba pasando por un problema de salud mental. “No me encuentro bien, estoy agotada. La experiencia, de las mejores de mi vida. Soy muy luchadora, ¡qué bien lo estoy y qué lástima de no poder estar a la altura! Pero es que no puedo, el cuerpo no puede, no puedo con mi alma, volveré cuando esté buena”. Estas fueron las palabras con las que la actriz se despidió del programa culinario y en las que ahora muchos expertos ven una llamada de alerta.

Hoy queremos repasar algunos de los indicios que pueden alertar de una depresión o trastorno psíquico, a fin de que pueda ser tratado a su debido tiempo y no desemboque en fatídicas consecuencias.

Un constante estado de ánimo de tristeza es una prueba evidente de que podemos estar ante una depresión o problema psíquico. Todos podemos estar tristes en algún momento pero el problema llega cuando la tristeza se convierte en una constante. La tristeza puede ser el modo de expresarnos pero también puede ser la apatía, la desgana, o la sensación de sin sentido de la vida.

Del mismo modo la ansiedad puede ser un síntoma de que algo no va bien. A veces, al igual que sucede con la tristeza, se confunden los picos de estrés -que todos tenemos en algún momento- con una ansiedad igualmente generalizada, que puede desembocar en presentar crisis de ansiedad o de pánico. El cuerpo suele avisar con esta serie de alarmas.

El cuerpo avisa del mismo modo aportando otras señales como los cambios en el hábito del sueño. Personas que sufren trastornos del sueño como insomnio puede ser una señal de alerta de que debe acudir, en primer lugar, a su médico de cabecera para que considere derivarlo al especialista.

Al igual que ocurre con los hábitos del sueño, cambios drásticos en los hábitos alimenticios también pueden reflejar un problema de salud mental, que puede reflejarse tanto con personas que pasan a comer en exceso y dejan de cuidarse, como lo contrario, que pierden el apetito.   

Inquietud, irritabilidad, dolores de cabeza o musculares que se vuelven crónicos y que no parecen responder a una causa física, dificultad de concentración en las actividades diarias y de interés por cosas que antes sí le gustaban pueden ser otros síntomas a tener en cuenta.

Además, algunas personas con depresión empiezan a reflejar sentimientos de culpa, desesperanza o inutilidad, los cuales pueden llevarles a las ideas de suicidio. Ante estos síntomas es recomendable siempre pedir ayuda.