El martes, día 21, comienza el verano.
El martes, día 21, comienza el verano.

Cómo cuidarse en verano para evitar los problemas de salud más frecuentes

Cómo cuidarse en verano para evitar los problemas de salud más frecuentes

La próxima semana entramos en el verano. Una época para disfrutar: agua, sol, ocio, viajes... Pero una estación en la que debemos extremar precauciones, prevenir accidentes y cuidar nuestra salud, especialmente en entornos de agua y ante las olas de calor.  

Los centros de salud y las Urgencias se llenan de complicaciones cuando llega el verano. La mayoría de ellas en una misma sintonía, la que se deriva del exceso de calor, del mayor ocio, o de la cercanía a las actividades con agua. El próximo miércoles, día 21, nos sumergimos de lleno en una de las épocas del año más disfrutonas y agradables, la época estival.

Pero también la más calurosa, por lo que según en qué zonas de España vivamos hemos de tener ciertas precauciones. El cambio climático y la acelerada destrucción del planeta que estamos realizando provoca lo que ya ha advertido la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET): ascenso de las temperaturas mínimas y máximas y un apreciable aumento de la sensación térmica.

Ante este excesivo calor, la AEMET recomienda beber suficientes líquidos, especialmente agua, y aunque no se tenga sed. Evitando bebidas con cafeína, alcohol o muy azucaradas. Hay que prestar especial atención a los niños -los menores de seis meses si están con lactancia materna exclusiva no necesitan agua-, embarazadas y madres lactantes, personas mayores y con enfermedades crónicas.

Se debe evitar estar al sol en las horas de mayor exposición solar, de 12 a 16 horas, permaneciendo a la sombra, y con ropa ligera, holgada y transpirable.

Protección solar +50 siempre

Es fundamental la crema solar, puesto que las quemaduras son uno de los problemas más habituales del verano, los cuales dejan rastro en la memoria de la piel. Una quemadura en una tarde de playa de una adolescente con unas amigas puede convertirse en un cáncer en la etapa adulta.

La protección solar es recomendable superior a 50 SPF y debe aplicarse durante todo el día, no solo en playas y piscinas. Ante las altas temperaturas y la elevada incidencia solar debemos aplicarnos protector también en la calle para ir a la compara o pasear. Además debemos hacer hincapié en cuello y rostro. Acompañando la protección de gorra y gafas de sol.

Problemas alimentarios

Con el calor apetecen comidas ligeras y esto se debe a que nuestro organismo es inteligente y sabe que le costará más hacer una digestión pesada cuando hace mucha calor. Es por ello que en verano es recomendable aumentar nuestra ingesta de frutas y verduras aún más, y evitar las comidas copiosas.

Si además estamos en un contexto de playa o piscina siempre debemos tener cuidado ante un posible choque de digestión, esperando el tiempo estimado según el tipo y cantidad de ingesta antes de bañarnos. En cualquier caso debemos meternos lentamente para evitar un cambio brusco de temperatura, mojando nuca y barriga en primer lugar.

¡Cuidado con el agua!

En verano tenemos más ocio y tiempo libre, lo que también deriva en mayores lesiones: cortes cocinando, caídas y fracturas haciendo deporte cuando no estamos acostumbrados, dolores de espalda porque nos movemos más y nuestro cuerpo de oficinista no está “desengrasado”...

Pero además disfrutamos de espacios como las playas o las piscinas, donde lamentablemente todos los años tenemos que lamentar ahogamientos tanto de niños como de adultos. En el caso de los menores debemos extremar la vigilancia, no dejándolos solos nunca ni aún cuando sepan nadar.

Pero también los adultos debemos extremar los cuidados y evitar el baño ante altas mareas, así como alejarse excesivamente de la orilla. Se debe extremar la atención en pantanos.

Nos adentramos, en definitiva, en el verano, una época para pasarlo bien, pero para ello debemos hacerlo con responsabilidad y cuidando nuestra salud. 

Cómo cuidarse en verano para evitar los problemas de salud más frecuentes